Legislatura

16/06/2016

-

PROPONEN INCORPORACIONES AL CÓDIGO DE FALTAS




Así lo plantearon los diputados radicales del interbloque Cambiemos Carim Peche, Mariana Salom y Gustavo Corradi que presentaron el PL 2386/16 donde proponen incorporar dos artículos – el 45 bis y el 45 ter – al Código de Falta de la Provincia del Chaco determinando sanciones a las personas que agredan a docentes o médicos en funciones, “ante el exagerado crecimiento de los porcentajes de violencia física, psicológica y verbal que en la actualidad deben padecer los médicos y docentes en ejercicio de sus funciones” señalan.


Se trata de sanciones que van desde el trabajo comunitario o arresto de hasta 15 días o multa de 2 remuneraciones mínima, vital y móvil, a aquél que en forma personal y directa ofenda en su dignidad y decoro, maltratare, acosare o agrediere verbal, moral o físicamente, siempre que no constituya delito a un docente, personal no docente o directivo, en ocasión del ejercicio de sus funciones (art 45 bis); iguales características y sanciones para con un médico o personal sanitario en ocasión de sus funciones (art 45 ter). En ambos casos el juez determinará la pena de acuerdo con la gravedad y reincidencia del hecho.

 

Los autores de la iniciativa consideran que “es de público conocimiento el exagerado crecimiento de los porcentajes de violencia física, psicológica y verbal que en la actualidad deben padecer los médicos y docentes en ejercicio de sus funciones” y en ese sentido indican que “basta con observar los pasillos de los establecimientos educativos, centros sanitarios o consultar directamente con docentes y médicos para anoticiarse la situación que diariamente padecen. No existe un docente o médico que no haya sido maltratado, agredido o acosado”.

 

“Con respecto a los docentes se calcula que el 35% pide ayuda psicológica y más protección en los establecimientos educativos” y actualmente, “se denuncia un caso por día de agresiones graves. Además de las agresiones y del estrés postraumático de la misma, hay que sumarle el miedo a la desprotección, reincidencia y pérdida de trabajo”. “Una vez que la lesión física se curó, el docente tiene que afrontar el estrés postraumático, las secuelas de esa agresión, que se manifiestan en trastornos conductuales, insomnio, irritabilidad, pánico.  Debido a la importancia vital de la educación como instrumento de crecimiento de una Nación es necesario que niños y jóvenes tengan docentes sanos, que puedan contenerlos, educarlos libremente y sin temor a represalias en situaciones de necesaria exigencia educativa” observan los legisladores.

 

Añaden que “en cuanto a la situación que atraviesan los médicos y el personal sanitario de los Centros de Salud Públicos, Privados y Salas de Emergencias es similar a la padecida por los docentes.  Permanentemente en las salas de atención los profesionales que la imparten están expuestos a un clima de agresividad creado fundamentalmente por los pacientes. El personal de vigilancia es uno de los más perjudicados. Uno de los problemas más frecuentes es el que tienen a la hora de evitar la permanencia de hombres en habitaciones de mujeres, y viceversa”.

 

“La dificultad más grave radica en que muchas de las consultas que se realizan en la sala de emergencias no representan una urgencia, lo que perjudica el trabajo de los profesionales. Lo que no entienden los pacientes es que los médicos están cumpliendo con la normativa, por lo que la espera a muchos los hace violentos. La espera genera que en muchos casos se agreda a los médicos y al personal, e incluso se los llegue a denunciar” son parte de los fundamentos que exponen propiciando la aprobación de la iniciativa.

 

 


Desarrollo:

Desarrollo de Software: Sistemas y Comunicaciones / José María Paz 170 / 1° Piso