Al respecto, la diputada Celeste Segovia rescata que con esta ley “se pretende contribuir a la conservación de la memoria colectiva sobre la epopeya que significó tal hazaña militar y política para nuestra América latina”. El Cruce de los Andes es considerado como uno de los grandes hechos históricos de Argentina, así como también como una de las mayores hazañas de la historia militar universal.
Aseguró que “Para la inmensa mayoría de los que estudian y enseñan la historia patria, el paso de los Andes es un hecho de gran realce, una empresa difícil, penosa y peligrosa, pero están muy lejos de imaginar lo arduo y sobrehumano que fue aquel cruce, único en los anales de la historia argentina y universal. Si exceptuamos a los cuyanos que contemplan, día tras día, ese imponente muro de proporciones gigantescas, y oyen a la continua las infinitas peripecias y mortales accidentes que allí tienen lugar, bien pocos han de ser los argentinos que tengan una idea, ni siquiera aproximada de lo que debió costar a San Martín cruzar la Cordillera”.
Calificó que “la hazaña de San Martín es algo único en su género. San Martín atravesó los Andes por empinadas y tortuosas huellas, por senderos de cornisa que sólo permitían la marcha en fila india, imposibilitado materialmente de llevar vehículos y debiendo conducir a lomo de mula su artillería, municiones y víveres, aparte de haber tenido que recurrir a rústicos cabrestantes e improvisados trineos para salvar las más abruptas pendientes con sus cañones, todo ello en soportando bajísimas temperaturas”.
Recordó que “San Martín logró derrotar definitivamente a los realistas en Maipú el 5 de abril de 1818. Este triunfo consolidó definitivamente la independencia de Chile. Varios días después, cuando llegó la noticia del triunfo, en Buenos Aires se organizaron bailes y festejos y la gente iba de casa en casa felicitándose y abrazándose”.
Para sintetizar la epopeya y compromiso con la patria grande citó las palabras del propio libertador "Orden General del 18 de julio de 1819 Compañeros del Ejército de los Andes: La guerra se la tenemos que hacer como podamos: si no tenemos dinero; carne y tabaco no nos tiene que faltar. Cuando se acaben los vestuarios, nos vestiremos con la bayetilla que nos tejan nuestras mujeres y si no andaremos en pelota como nuestros paisanos los indios, seamos libres y lo demás no importa. Compañeros, juremos no dejar las armas de la mano hasta ver el país enteramente libre, o morir con ellas como hombres de coraje". José de San Martín.
Rubén Guillón, en los fundamentos de su iniciativa señaló que “la frase “San Martín cruzó los Andes” dejó de ser un versito escolar. Enternece y conmueve pensar en aquellos hombres mal vestidos, mal montados, mal alimentados, pero con todo lo demás muy bien provisto como para encarar semejante hazaña. Y detrás y delante de ellos, un hombre que no dormía pensando en hacer justicia. No lo ganaba la soberbia. Podía confesarle a sus mejores amigos: ‘lo que no me deja dormir no es la oposición que puedan hacerme los enemigos, sino el atravesar estos inmensos montes’”.
Recordó que “pocos meses antes de iniciar una de las epopeyas más heroicas que recuerde la historia militar de la humanidad, San Martín impone a sus soldados y oficiales del Código de Honor del Ejército de los Andes, que entre cosas sentenciaba: ‘La patria no hace al soldado para que la deshonre con sus crímenes, ni le da armas para que cometa la bajeza de abusar de estas ventajas ofendiendo a los ciudadanos con cuyos sacrificios se sostiene. La tropa debe ser tanto más virtuosa y honesta, cuanto es creada para conservar el orden, afianzar el poder de las leyes y dar fuerza al gobierno para ejecutarlas y hacerse respetar de los malvados que serían más insolentes con el mal ejemplo de los militares. Las penas aquí establecidas y las que se dictasen según la ley serán aplicadas irremisiblemente: sea honrado el que no quiera sufrirlas: la Patria no es abrigadora de crímenes’” citó.
El legislador instó a sus pares “ante tanta muestra de entrega y patriotismo, al cumplirse los doscientos años de esta gesta que ha marcado nuestros designios y en homenaje a nuestro Prócer por su convicción plena de una América unida y libre, solicito a mis pares legisladores la aprobación del presente proyecto de ley”.
Otras propuestas
El diputado Livio Gutiérrez mocionó la aprobación de su propuesta 4772/16 por la que se pretendía establecer que “a partir del 1° de enero de 2017 y hasta el 31 de diciembre de 2017, toda documentación oficial expedida por las distintas reparticiones y entes que conforman el Sector Público Provincial, deberá incluir en el margen superior, un sello o impresión con la leyenda: “2017 Año de la concientización sobre la Violencia de Género #niunamenos””.
El legislador fundamentó que “la cuestión de la violencia de género, cuya consigna se simboliza con #niunamenos, es una de las mayores preocupaciones en el país y la provincia en los últimos tiempos. Se ha tipificado el Femicidio en el Código Penal, se han creado fiscalías y fueros especiales para la cuestión, se ha hecho difusión desde el Estado por todos los medios, se han hecho numerosas marchas, hemos establecido leyes y resoluciones desde este cuerpo, sin embargo las estadísticas marcan que el problema sigue vigente”. Esta propuesta contó con 13 votos del Interbloque Cambiemos y Libres del Sur.
Además, la diputada Viviana Damilano, señaló que, si bien apoyaba la iniciativa de la diputada Segovia, esperaba que el año entrante se considere su propuesta 5051/16 por el que se solicita que el membrete sea “año de la prevención y concientización sobre el maltrato infantil”, destacando que “tenemos que trabajar sobre esta problemática que ha crecido y que preocupa, es alarmante el estudio de Unicef acerca del grado de violencia que padecen los niños, asesinatos, trabajos forzosos, reclutamiento, niños que viven con miedo en sus hogares”.