La propuesta fue impulsada por el presidente del bloque Justicialista Hugo Sager quien lo fundamentó en el Recinto y detalló que “con esta propuesta pretendemos hacer un reconocimiento al Doctor Ramón Carrillo, quine fuera el primer ministro de salud pública y asistencia social, una eminencia en la neurocirugía, en el gobierno de Juan Domingo Perón le pide la creación de un sistema sanitario, que revolucione lo que hasta ese momento había”.
Recordó en esta línea que “hasta el año ’46, en nuestro país, el hospital era ‘un depósito’ de aquellas personas abandonadas por la sociedad, familiares, iban allí con la perdida de salud, a esperar el momento de su muerte, y estaba lo otro, sanatorios que eran donde iban aquellas personas con mayor poder adquisitivo y toda la herramienta de la medicina puesta a funcionar en esa institución permitía recuperar la salud” valoró Sager.
“Carrillo utilizo métodos que fueron revolucionario y eso generó una empatía con la ciudadanía y la dirigencia que tuvo apoyo, luego en cada uno de los emprendimientos que llevó adelante” consideró Sager.
Ya en el exterior “Carrillo encontró un lugar de trabajo en el que retomar sus investigaciones, en Brasil, también logró que aquél país incorporara el sanitarismo y el control primario de la salud, cuando llega su muere, la propia fuerza área de Brasil que propuso rendirle honores, y traerlo a la República Argentina a sus fines póstumos. La sorpresa que el gobierno de aquél momento – de la revolución fusiladora - no solo no permitió que ocurriera sino aun en la muerte lo mantuvo exiliado, años posteriores los restos pudieron venir”.
Sager finalizó puntualizando que “ya a partir del año 2003 Ramón Carrillo volvió a tener preponderancia y las generaciones actuales y futuras pueden reconocer su tarea porque las políticas públicas que se llevaron adelante, fueron en ese sentido, y se rescató a Carrillo y hoy nuestros centros asistenciales llevan su nombre”.